Xavier Pueyo

Descripción

En 2007, la Cruz Roja de Burundi creó grupos de apoyo descentralizados llamados «Unidades de la Colina». Cada una de estas agrupaciones está formada por personas voluntarias que se han ido uniendo para apoyar a las personas vulnerables de su comunidad. Cada voluntario dedica de 2 a 4 horas de su tiempo a la semana. Gracias a estos grupos, hoy en día, la Cruz Roja de Burundi cuenta con 2920 “Unidades de Colina” en todas las colinas del país y una amplia red de más de 600.000 voluntarios. 

Contexto

En 2005, cuando la Cruz Roja de Burundi inició su primer proceso de reestructuración, que tardó casi tres años en completarse, se consideraba inicialmente una organización «sin cimientos». Aunque contaba con comités a todos los niveles, faltaba lo esencial: comités locales de base operativa.

Detalles técnicos y operativos

Así, en 2007, gracias a la promoción sostenida con sus socios del Movimiento, la Cruz Roja de Burundi experimentó este nuevo enfoque de «Movilización de Recursos Locales Sostenibles». A nivel africano, la Cruz Roja de Burundi fue elegida, junto con Ghana, para pilotar y probar este proyecto apoyado por la Federación Internacional de Sociedades de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja.

En Burundi, la experiencia involucra a dos provincias (Ruyigi y Karuzi) y a dos colinas, Gasasa y Kiyange y el mismo leitmotiv en la comunicación: juntos podemos hacer mejor las cosas para ayudar a los más vulnerables.

Se crearon los primeros grupos de autoayuda en las dos colinas Gasasa y Kiyange. La noticia se difundió muy rápidamente y, en un tiempo récord, se crearon más grupos que se convertirían en lo que la Cruz Roja de Burundi llama con orgullo «Unidades de Colina». Una marca registrada por la Cruz Roja de Burundi.

La “Unidad de Colina” no es sólo el equivalente físico de la estructura administrativa más descentralizada, la colina, sino que también es el punto dela reunión de todos sus voluntarios que se han ido uniendo para responder a las distintas formas de vulnerabilidad que se sienten en la comunidad. Ofrecen de 2 a 4 horas de su tiempo a la semana, para ayudar a las personas más vulnerables identificadas en la comunidad.

Desde entonces, cada voluntario está inscrito en una unidad donde se celebran reuniones semanales para acordar el plan de ayuda a las personas vulnerables identificadas. Esto permite a los voluntarios de las “Unidades de Colina” sentirse unidos en torno a un objetivo común.

Actividades de autopromoción

A nivel de las colinas, la Cruz Roja de Burundi todavía no reconoce actividades generadoras de ingresos, sino de acciones de autoayuda que unen a los propios miembros de las unidades. Una vez identificadas las necesidades por ellos mismos, los miembros las ponen en práctica con el objetivo de tener los medios para ayudar siempre a los más vulnerables sin tener que recurrir siempre a sus reservas. El gran mérito de estas actividades es mantener unidos a los miembros de las diferentes “Unidades de Colina” y contribuir a su cohesión.

Oficios útiles para el desarrollo comunitario

En su búsqueda de estrategias, la Cruz Roja de Burundi ha incluido, desde su Plan Estratégico 2014-2017, la promoción del desarrollo comunitario.

El Plan Estratégico 2014-2017, tenía el principal objetivo de la promoción de oficios útiles para el desarrollo comunitario. Los voluntarios se han formado como albañiles, carpinteros, constructores de fuentes y en otros oficios como la alfarería, la cestería, etc. para contribuir a su desarrollo, al de su “Unidad de Colina” y al de su comunidad. Gracias a las actividades que realizan, parte de los fondos que obtienen se ingresan en las cuentas de su unidad.

Despliegue e impacto

En la actualidad, la Cruz Roja de Burundi cuenta con 2.920 unidades en las colinas en todo el país y una amplia red de más de 600.000 voluntarios. Con las “Unidades de Colinas” del país y una vasta red de más de 600.000 voluntarios, los comités son operativos a todos los niveles. 15 años después, la cara de la Cruz Roja de Burundi ha cambiado de forma significativa y positiva. Las “Unidades de Colina” se consideran ahora la puerta de entrada a todas las operaciones y servicios de la Cruz Roja de Burundi.